En el masaje se utilizan antebrazos, codos, muñecas, palmas y dorso de las manos con movimientos rítmicos, armoniosos y delicados como si de la danza Aloha se tratara.
Se trata el cuerpo como un todo, de forma global, se trabajan a la vez diferentes partes del cuerpo para que el cerebro no sea capaz de concentrarse en todas ellas y termine desconectando y relajando para lograr el equilibrio entre lo físico, psicológico y espiritual.
Los problemas musculares o estrés, no solo nos afectan en el aspecto físico, también no afectan en el flujo de energía y en el aspecto psicológico.